- No te rías cuando lo haga: sé que incluso con el dolor que pueda causarnos muchas veces lanzamos una carcajada con quejido y esto puede, por el contrario a dejar de hacerlo, incentivar a que lo repita y eso no será nada agradable para ti.
- Avísale que si muerde, no habrá teta: miralo a los ojos y dile que te ha dolido, puedes ayudarte emitiendo el sonido universal del dolor «AUUSH», de esta manera el niño relacionará mordida y molestia, incluso relacionará mordida, molestia y que le dejas de dar teta cuando lo hace.
- Evita gritarle: pon la cara más neutra, recuerda que queremos que asocie y aprenda. No pretendemos asustarlo y hacerlo llorar sin aprendizaje. Es mejor el aprendizaje que se adquiere de a pocos y duran en el tiempo, que los comprtamiento dejados por miedo.
- Si crees que el problema pueden ser los dientes y está en edad de introducir alimentos a su dieta láctea puedes ofrecerle una fruta o verdura fría (consulta con el nutricionista pediátrico), en caso tenga menos de 6 meses una buena opción es darles las paletas de leche materna.
- No lo pierdas de vista mientras mama: en este proceso de hacer que deje de morder ayuda mucho hablarles durante la toma, no perder el contacto visual y buscar un juguete que le guste para jugar mientras mama.
Verás como estos tips te ayudan a pasar esta etapa rápidamente.
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